Brian Belott

Narrator: Brian Belott describe sus pinturas congeladas, que se exponen en una pequeña cámara oscura.

Brian Belott: El proyecto comenzó una noche en 2012. Era verano y hacía mucho calor. Yo buscaba cualquier excusa para meter la cabeza en la tundra helada del congelador.

Aquella noche en particular estaba torturando un collage. Lo que quiero decir es que estaba añadiendo más y más a un collage y, en cierto momento, probablemente alrededor de las cinco de la mañana, se me ocurrió algo. A ver, podría seguir poniendo más y más cosas sobre este collage, pero ¿qué pasaría si meto el collage en una fuente de agua y luego pongo los recortes —o las distintas imágenes o lo que sea que vaya a incluir en el collage— en la fuente con agua y lo meto todo en el congelador y veo en qué lugar terminan por congelarse?

Narrator: Belott comenzó a crear estas obras utilizando materiales que podían ser un poco repulsivos si se los sacaba de contexto: mostaza, kétchup, pasta de dientes, gel para el cabello. En las obras expuestas aquí, también incluyó un ábaco, distintos tipos de rocas y pesos de un reloj de pie. Instaladas con una luz que brilla a través de ellas, se asemejan a vidrios policromados. 

Brian Belott: Me gusta la unión de opuestos allí, el hecho de que es desagradable, pero mismo tiempo muy bello. De que es impráctico. Siento que aquí se unen muchas fuerzas opuestas, lo que para mí representó una propuesta emocionante.