Raúl de Nieves
Mar 17, 2017
0:00
Raúl de Nieves
0:00
Raúl de Nieves: Detrás de las figuras se encuentra una serie de vitrales hechos a mano. La historia que cuentan los vitrales es la aceptación no sólo del cuerpo sino también de los alrededores. Por eso la mosca se vuelve tan importante. Porque, de cierta manera, la mosca es desecho; es la parte grotesca de la vida. Un día vi a dos moscas apareándose en mi estudio. En ese momento comprendí que la mosca soy yo o es parte de mí, y debía celebrarlo, e intenté pensar en sus facetas. La mosca tiene muchas facetas, relacionadas con su procedencia, con su alimento y sus actividades. La mosca en la historia se convierte en gozo.
También se asocia con el miedo. Miedo a morir, miedo a estar solo, miedo a ser olvidado, miedo a tener una pareja, miedo a amar el tipo de sexo equivocado, miedo a vencer un obstáculo. Además, sólo quise que esta obra tuviera su propio desempeño para interactuar realmente con nuestro entorno. Aún se puede mirar hacia fuera y ver la ciudad más allá del vitral. El sol vigilará cómo danza durante el transcurso del día. Las luces artificiales en la noche vigilarán cómo la gente lo ve a través de las calles.
In Whitney Biennial 2017 (Spanish).